Kim, el servicio mas delicioso que puedas imaginar, te lo garantizo.

¡Déjame juguetear desenfrenado entre el elixir de tus vides, Para así embriagarme entre los sutiles laberintos de un capullo! El tiempo se hace eterno en el instante en que cohabitas mis denuedos Y me cobijo entre los pliegues de tu sexo y al final nada tan destellante Como el perfume viril de tu ansiedad que arropa la soledad

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